Los billetes, el pasaporte, las reservas del hotel, los pases para el metro… Lo tienes todo preparado pero cuando llega el momento de tenerlo a mano te pasas tres horas buscando en el bolso o la mochila y todo acaba suelto con los nervios.
¿Y no sería más fácil llevarlo todo juntito en un portadocumentos? Así solo tienes que abrir, coger lo que te interesa y volver a cerrar. Fácil, ¿verdad?